La Justicia de La Matanza dictó la prisión preventiva para los tres acusados de asesinar de un balazo al joven Nahuel Zárate durante un robo cometido en junio pasado en la localidad bonaerense de Virrey del Pino, informaron hoy fuentes judiciales.

La medida de la jueza de Garantías Carina Andrijasevich recayó sobre Luis Miguel del Castillo (33), Nahuel Hernán Montenegro (29) y Emiliano Hugo Romano (24), quienes se encuentran imputados, en calidad de coautores, del delito de "robo agravado por el uso de arma de fuego en concurso real con homicidio criminis causa".

El pedido de procesamiento con prisión preventiva para los tres detenidos fue solicitado por el fiscal Claudio Fornaro, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Temática Homicidios del Departamento Judicial de La Matanza.

Voceros judiciales informaron a Télam que entre los fundamentos de la solicitud del fiscal Fornaro se encuentra principalmente el testimonio de la novia de Zárate, quien estaba junto al joven cuando fueron asaltados.

Es que el mismo día del hecho los ladrones fueron detenidos horas después y trasladados a la comisaría local, donde al ingresar fueron reconocidos de inmediato por la chica que se hallaba casualmente en la guardia de la seccional para realizar trámites vinculados a la causa.

Asimismo, la joven pudo identificar a del Castillo como quien efectuó el disparo mortal, informaron fuentes judiciales.

En tanto, otro dos testigos presenciales describieron la ropa que vestían los delincuentes y los roles de cada uno del hecho.

Por otra parte, al momento de declarar ante Fornaro, los tres imputados negaron su participación en el crimen de Zárate pero incurrieron en "serias contradicciones en sus dichos", añadió un informante consultado.

Por su parte, Sergio Bocarelli, amigo de la familia de la víctima, dijo hoy a Télam se siente conforme con la decisión tomada por la Justicia, al tiempo que afirmó que "lo que se puede destacar sobre todo fue el procedimiento policial", para que pudiera avanzar rápidamente la causa.

"Ojalá nunca a nadie le toque pasar por una situación así, ojalá no haya mas de estos casos, porque es muy triste. Es un día a día hacer de cuenta que no vas a ver a esta persona, es un duelo permanente, es tratar de reconstruirse como uno puede, es tratar de buscarle sentido a la vida", reflexionó Sergio, quien fue compañero de trabajo de Alcides, padre de Nahuel, y de colegio de Estela, la mamá del joven.

En cuanto a la víctima, Sergio señaló que "era un buen pibe, amable, muy agradable, muy pícaro en todos los sentidos" y al que "todo el mundo lo conocía".

"Yo había hablado la noche anterior a su muerte con él por Messenger y me contaba del emprendimiento que tenía, me pasó el video para que yo vea como estaban elaborando chipa", contó el hombre.

Es que Nahuel era propietario de un gimnasio situado a la altura del kilómetro 37 de la ruta 3 junto a su melliza Tamara y su hermano Brian, el cual debió cerrar sus puertas cuando comenzó el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO), lo que lo obligó a emprender una actividad de venta de comidas.

Por último, Sergio dijo que cree que "a la familia le va a costar mucho" superar la muerte de Nahuel, y que "durante muchos días" trató "de no llamarlos para dejarlos hacer su duelo", hasta que en el último tiempo retomó el contacto.

"Alcides tenía miedo de esto, lo habíamos hablado el día que le compraron el primer auto a Nahuel. Tenía la certeza de que esto alguna vez podía pasar", concluyó el hombre.