Entre los afectados, se encuentra Rafael Lozada, quien se desempeñaba como líder de producción de Semillas en Bayer Conosur, además de la no renovación del contrato con una empresa local de seguridad e higiene.

Con un historial de desvinculaciones masivas sin previo aviso y clima de incertidumbre, la empresa, conocida por su liderazgo en el sector de semillas y agroquímicos, refuerza la sensación de inestabilidad laboral entre sus empleados y los propios rojenses.

En un contexto económico difícil, la pérdida de empleo impacta gravemente en la vida de los trabajadores, mientras que la compañía, con una lógica estrictamente comercial, parece priorizar sus intereses corporativos por encima del bienestar de su personal.

Según el sitio web oficial de Bayer Monsanto, la planta María Eugenia, próxima a la ciudad bonaerense de Rojas, con 23 hectáreas dedicadas a la innovación tecnológica, posee una capacidad de producción de 3,6 millones de bolsas de semilla de maíz híbrida, empleando a más de 2500 empleados de esa y otras ciudades de la región, en todo su proceso de Planta y Campo cada año.