El informe muestra a su vez una falta de planificación en el uso del recurso, áreas que tienen su personal como participando de otras, todo en base a cruzar dos datos: lo presupuestado y aprobado por ordenanza y lo finalmente ejecutado e informado en la rendición de cuentas.

El ojo de Juntos ya viene siendo critico con la liviana manera de usar el presupuesto: el intercambio de partidas, la sub valoración de cada año (presupuestar menos, para usar libremente las diferencias), y el manejo de la deuda que solo a modo de ejemplo implicó que más del 10% del ejecutado 2024 se haya pasado en modo deuda flotante, para el ejercicio actual.

El trabajo del concejal Diego Piacentini dejó demostrado que no solo el año 2023 tuvo mas empleados de los que se presupuestaron: en el año 2022 la administración Barrera empleó 531 empleados más de los presupuestados.

Las ineficiencias del manejo del personal llevan a otro dato llamativo: áreas enteras como las Secretarias de Planeamiento, de Gobierno y de Acción Social no tuvieron personal presupuestado, pero si ejecutado. Otro ejemplo fue el propio Concejo Deliberante: de los 30 cargos aprobados terminó pagando por 37, lo que no se explica ni siquiera por las divisiones de los Bloques Pro que sumaron un secretario más, ni la aparición del bloque de la Libertad Avanza de Luis Vivas, mas un fotógrafo sumado por la presidencia del Concejo y al servicio del Frente de Todos. Aun así, faltan cargos.