Savore consideró que estos aumentos ya habían sido calculados por los 'grandes monopolios o oligopolios'.
Un cambio significativo es el paso de los consumidores de las primeras marcas a la “marca pyme”.
Como ejemplo, mencionó que un pan lactal de primera marca se vende alrededor de $ 5.000, mientras que opciones de empresas pyme se ofrecen a $ 2.200.
Esta tendencia se observa en otros productos como galletitas, fideos y mermeladas. La cantidad de pan lactal de primera marca que vende es menor en comparación con las marcas pyme, lo que refleja la disposición limitada del público a pagar precios más altos.
Savore comentó sobre una empresa de gaseosas que decidió 'bajar el precio de la gaseosa, la de 2 L para vender en $ 2.000 pesos'.
Sin embargo, indicó que el “el primer reflejo no es competir, el primer reflejo es aumentar”.
A pesar de esto, Savore enfatizó que “el último que tiene la palabra es el consumidor”, quien decide qué comprar.