Desde Fundación Capital relevaron los acuerdos paritarios del mes pasado y, si bien la desaceleración de 1,1 puntos que se observó en el IPC del Indec, que pasó a una inflación mensual del 2,8% durante abril, lo cierto es que los acuerdos salariales terminaron promediando 1 punto por debajo de ese número. La consultora afirmó, además de que “la paritaria de estatales nacionales cerró con aumentos de 1,3% mensual para marzo, abril y mayo”, bien por debajo de un IPC que estuvo en 2,8% en abril y promete alrededor del 2% en mayo, también que en abril se prolongó la caída para los privados.

Sostuvo: “Abril no habría sido mucho mejor. Es cierto que el traslado a precios de la volatilidad cambiaria tras el abandono del crawling peg fue limitado, con un registro de inflación del 2,8% mensual frente a estimaciones iniciales que se acercaban al 4,5%-5%. De todos modos, con la normal demora en la reapertura de paritarias en contextos de incertidumbre, el poder adquisitivo habría verificado una pérdida no despreciable en el cuarto mes del año (0,4% real). De esta forma, en el primer cuatrimestre el salario del sector privado registrado habría disminuido 1,9% en términos reales, truncando el camino de recuperación evidenciado desde abril de 2024”.

Luego, proyectaron un freno en la caída en mayo, aunque finalmente un total del 2025 en baja: “El quinto mes del año con algunas reaperturas en las paritarias podría evidenciar un resultado neutro a ligeramente positivo, en un marco donde el IPC volvería al rango 2%-2,5%. Sin embargo, hacia delante, con las autoridades reforzando el ancla salarial, el sendero de recuperación del poder adquisitivo luce limitado. En este contexto, en el mejor de los casos, los ingresos de los trabajadores del sector registrado empardarían la dinámica inflacionaria en la segunda mitad de año. Así, el salario real transitará el 2025 en un nivel acotado, sin superar el de finales de 2024. En una comparación de largo plazo, el poder de compra del sector privado registrado continuaría 20 puntos por debajo del promedio de 2017 y unos 35 puntos en el sector público”.

Desde la consultora Vectorial explicaron la lógica de ancla inflacionaria detrás del techo del 1% que el Gobierno busca imponer para las paritarias: “Un aumento de los salarios podría impulsar un aumento de la demanda agregada que tendría impactos inflacionarios principalmente, y en las cuentas externas del país en segundo lugar (creciente consumo de de bienes importados). En el marco del desancle del tipo de cambio, los agregados monetarios (ver siguiente sección) y con el cuadro fiscal muy finito para cumplir con la meta del FMI, los salarios de los trabajadores parecieran aparecer como una nueva ancla para contener el proceso inflacionario. De confirmarse la intención del gobierno de ponerle un techo a las paritarias, aún en un sendero de desinflación, costaría volver a niveles previos experimentados en materia salarial”. 

Los sueldos en la construcción cayeron en abril

Los salarios de la construcción cayeron un 1,9% en abril, lo que impactó en forma deflacionaria sobre los costos del sector. El informe del Indec del Índice del costo de la construcción en el Gran Buenos Aires (ICC) correspondiente a abril, publicado este lunes, mostró algo de lo que se espera según Fundación Capital para los salarios durante el cuarto mes del año y reflejó una suba de los costos de construir de solo un 0,5% mensual, que se explicó justamente por el ancla salarial.

Así, mientras que los materiales mostraron una suba del 2,9%, los gastos generales acompañaron con un aumento del 1,7%. En cambio, la mano de obra tuvo signo negativo cedió un 1,9%.