Francos dijo que uno de los pilares de la gestión fue la batalla por controlar el gasto público y hacerlo más eficiente. En este sentido, se logró reducir el gasto público un 7%, recuperando el superávit fiscal sin necesidad de emisión monetaria. Además, se destacó la caída de la inflación, que pasó de un índice diario de 1% a un 2.7% en octubre, la cifra más baja desde 2021.

Otro logro destacado, a su entender, fue el incremento de las reservas, que subieron casi 10 mil millones de dólares desde diciembre de 2023 hasta finales de noviembre de 2024. A su vez, el Riesgo País cayó a niveles más bajos de los últimos cinco años.

Para Francos, la recuperación económica también se reflejó en un crecimiento de las exportaciones, que en octubre aumentaron un 30% con respecto al año anterior, y en la industria, que registró un crecimiento del 2.6% en septiembre.

El ministro coordinador resaltó las políticas de desregulación y ordenamiento macroeconómico que están permitiendo a Argentina posicionarse nuevamente como un país confiable para la inversión. El Régimen de Incentivos a la Generación de Inversiones (RIGI) ha permitido que Argentina se abra a grandes inversiones, con seis proyectos confirmados por un total de 7.800 millones de dólares en diversas provincias del país..

En el sector energético, sostuvo que Argentina experimentó un superávit de 618 millones de dólares en octubre y alcanzó una producción histórica de hidrocarburos, con un crecimiento interanual del 12.3% en la producción de petróleo. Dijo también que ños recursos de Vaca Muerta, junto con una gestión eficiente, posicionan al país como una potencia emergente en la producción de energía a nivel global.

A su etender, el gobierno considera que, con las políticas implementadas, Argentina tiene el potencial de convertirse en un líder global en materia energética, aprovechando los recursos naturales y promoviendo el crecimiento económico a través de inversiones estratégicas.