Asimismo, el Pontífice advirtió sobre las dificultades actuales que enfrentan quienes buscan la justicia, calificando la coherencia cristiana como una 'belleza rechazada' por aquellos que temen perder sus cuotas de poder.__IP__


En un pasaje de fuerte contenido social, León XIV denunció que 'quienes hoy creen en la paz y han elegido el camino desarmado de Jesús y de los mártires, son a menudo ridiculizados, excluidos del debate público y, no pocas veces, acusados de favorecer a adversarios y enemigos'. Frente a este escenario, reivindicó la figura del perdón al recordar que 'Esteban murió perdonando, como Jesús: por una fuerza más auténtica que la de las armas'. 


Finalmente, el Santo Padre instó a reconocer la dignidad del prójimo como base de la esperanza, definiéndola como 'una fuerza gratuita, presente en el corazón de todos, que se reactiva y se comunica de manera irresistible cuando alguien comienza a mirar a su prójimo de otra manera', antes de pedir la intercesión de la Virgen María para alcanzar una alegría que disipe todo temor 'así como la nieve se derrite al sol'