El cambio fue motorizado por el ministro de Defensa, Luis Petri, y ante una de las demandas históricas de las FFAA que ya venían rezagadas ante la inflación.
El DNU argumenta que la situación de desfasaje terminaba "ocasionando un perjuicio directo sobre el personal no civil de las Fuerzas Armadas y de Seguridad, al no poder recibir incrementos en sus retribuciones en condiciones homólogas a las del personal civil".
De esta manera, el oficialismo vuelve a hacerle un guiño a las FFAA. Días atrás, el presidente Javier Milei expresó en el brindis de camaradería que los "gobiernos anteriores "ocultaron el rol de los que dan su vida por la patria".
"Vamos a reconciliar a la política con las Fuerzas Armadas", sentenció el jefe de Estado.