En relación a lo sucedido la tarde anterior, Grabois señaló “no tengo una imputación específica y no hubo una orden de desalojo. Hubo una permanencia pacífica de un grupo de personas que estábamos reclamando es el derecho a la memoria histórica y que se deje de avasallar con la actitud dictatorial de este Gobierno. Particularmente Patricia Bullrich, que es una mujer muy perversa”. 


Con fuertes críticas al Gobierno nacional y particularmente a la ministra de Seguridad, el posible candidato a diputado nacional por la PBA recordó: "La última vez que estuve tanto tiempo en una comisaría, ¿sabés cuándo fue? el 20 de diciembre del 2001, a disposición del Poder Ejecutivo nacional. También un gobierno de persecución, con Bullrich, Sturzenegger, los mismos". Y agregó con vehemencia: “Entré a la tardecita ese día, y a la madrugada del día siguiente no estaba más Bullrich ni ese gobierno. Este Gobierno dictatorial va a terminar, porque hay argentinos y argentinas que tienen el coraje para decirle no a los atropellos".


El conflicto se desató a raíz de que gobierno de Javier Milei a través de la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, intentara desalojar el edificio de la antigua residencia de Juan Domingo y Evita Perón ubicado en la calle Austria 2601, en el barrio de Recoleta, donde funciona el Instituto Juan Domingo Perón. Grabois presentó una denuncia penal contra la ministra y sus funcionarios por daño agravado, alteración y destrucción de documentos confiados a su custodia y abuso de autoridad, en representación de la cooperativa de trabajadores que gestiona el bar “Un café con Perón”. Pettovello les había dado plazo hasta este sábado 7 de junio para abandonar el lugar, a pesar de que tenían la concesión hasta 2027 por contrato. 


"Lo que hicieron en el Instituto Juan Domingo Perón fue intentar borrar la historia de una parte de nuestro pueblo. Destruyeron todo, se llevaron todo, pusieron estatuas de Evita y Perón en una bolsa mortuoria", afirmó Grabois luego de ser liberado. El dirigente de Argentina Humana agregó: “Estoy muy orgulloso de poder combatir junto a hombres y mujeres con las mismas convicciones a este Gobierno, y estamos decididos a venir todas las veces que sea necesario a conocer las instalaciones de la Policía Federal si acá nos quiere Bullrich. Lo que no nos va a poder sacar ni nos pudo sacar es la bandera argentina”. 


Grabois remarcó que “los policías te cuentan que ganan miserias, que están muy enojados, que no les gusta pegarle a los jubilados, algunos chicos muy jóvenes", y fue a fondo contra la titular de Seguridad: “Bullrich las va a pagar muy muy caro. Yo estoy acá con mis compañeros, cuando ella salga, después de los largos años que le van a tocar en prisión, no va a tener gente que la espere afuera. Nosotros sí, tenemos compañeros que estuvieron esperando porque nos quieren y porque somos buenas personas. Ellos no. Cuando yo me muera voy a ir con Dios, y ellos van a ir a otro lado".


Parándose desde un lugar fuertemente opositor, que preanuncia lo que será su participación en la campaña electoral, aún resta ver si dentro o fuera del peronismo, el dirigente político señaló "a mí este Gobierno no me quiere y es una de las cosas más lindas que me pasó en la vida. Tener enfrente a  esta mierda de gente me llena el corazón. Si Patricia Bullrich piensa que nos va a domar con esto no sabe de la madera que estamos hechos".


Consultado por los rumores crecientes sobre la inminencia del posible fallo de la Corte Suprema contra CFK, Grabois expresó "es increíble cómo nos enteramos de las sentencias antes de que salgan los fallos. Yo me enteré a qué hora iba a tener la entrevista con el juez antes de que tuviera la causa. Estamos en un régimen de facto, no rige la Constitución, para nadie. Es un Gobierno que ha roto el estado de derecho". Finalmente, el dirigente remató: "Bullrich las va a pagar, Milei las va a pagar, Karina Milei las va a pagar, Pettovello las va a pagar, y nosotros les vamos a cobrar cada uno de sus crímenes sociales".