Este panorama coloca nuevamente en escena el rol fundamental que tiene dentro del sistema previsional argentino el Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS). Fue creado en 2008 a través de la Ley 26.425, en la que también se dispone la unificación del régimen previsional de reparto y la eliminación de las Administradoras de Fondos de Jubilaciones y Pensiones (AFJP), transfiriendo sus activos al Estado nacional. Por aquel entonces, las principales críticas a las AFJP se centraban en la limitada cobertura alcanzada, la inequidad en las prestaciones otorgadas y la alta carga administrativa.
El FGS fue concebido como una pieza clave del sistema para garantizar la preservación de los recursos previsionales y actuar como un fondo anticíclico ante distintas fuentes de inestabilidad macroeconómica, ya sean internas o externas. También es una herramienta de respaldo financiero para la ANSES, un resguardo del ahorro previsional, una fuente de recursos para promover el desarrollo económico y social por medio de inversiones estratégicas y una garantía para el pago de jubilaciones y pensiones.
En la Carta Orgánica del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) de ANSES se establecieron los parámetros de inversión, regulados principalmente por la Resolución 13/2018 de la Secretaría de Política Económica y por disposiciones internas de ANSES que derivan de la Ley 24.241 y su modificatoria, la Ley 26.425.
Los parámetros de inversión del FGS
Tipo de activo del FGS | % de la cartera |
---|---|
Títulos públicos nacionales | Hasta 50% |
Depósitos a plazo fijo y cuentas remuneradas | Hasta 15% |
Acciones de empresas argentinas | Hasta 30% |
Proyectos productivos y de infraestructura | Hasta 20% |
Fondos Comunes de Inversión | Hasta 15% |
Instrumentos del exterior | Menor al 10% |
Préstamos a beneficiarios del SIPA | Límite específico por resolución |
¿Creció el FGS?
En un momento inicial, el FGS presentaba una fuerte concentración en títulos públicos: en 2009 llegaron al 60% de la cartera, muy por encima de, por ejemplo, los plazos fijos (10,4%) y de las acciones (8%). Además, se autorizaron diversos proyectos de inversión productiva y en empresas con participación estatal (2,2%).
Entre 2011 y 2015, aumentó la participación en acciones y proyectos de infraestructura, llegando a 12,87% del total del FGS. A su vez, se registró un mayor uso de los fondos para financiar programas estatales, como fueron en su momento Pro.Cre.Ar y préstamos a provincias. Estas modificaciones no alteraron el predominio de los títulos de deuda pública como el principal activo del Fondo de Garantía, que llegaron, en promedio, al 64%.
Entre 2016 y 2019 se establecieron por primera vez los parámetros y los porcentuales formales y públicos para cada clase de activo. Con el objetivo de aumentar la diversificación del fondo, se buscó reducir el peso de los bonos soberanos y se incluyó un techo para invertir en títulos públicos nacionales, acciones, proyectos productivos e instrumentos en el exterior. Además, se obligó a los responsables del FGS a reportar la composición y la rentabilidad.
A partir de 2019 comenzó a aumentar la exposición del FGS a títulos públicos por canjes y necesidades de financiamiento del Tesoro, y se flexibilizó en la práctica el cumplimiento estricto de los porcentajes para poder sostener liquidez y asistir al Estado.
A valores nominales, el FGS cerró 2024 con un activo total de $76.9 billones, lo que representó un incremento del 90% respecto de 2023, diferencial que se encuentra por debajo de la inflación de ese año, que fue del 211%. La composición quedó de la siguiente manera:
FGS 2024 | $ millones | % FGS |
---|---|---|
DISPONIBILIDADES | 526.506 | 0,68% |
PLAZO FIJO | 135.618 | 0,18% |
TÍTULOS | 56.631.412 | 73,64% |
OBLIGACIONES NEGOCIABLES | 320.996 | 0,42% |
PROYECTOS PRODUCTIVOS | 3.274.604 | 4,26% |
ACCIONES | 13.232.491 | 17,21% |
FCI | 219.311 | 0,29% |
PRÉSTAMOS PARA BENEFICIARIOS SIPA | 868.906 | 1,13% |
OTROS | 1.695.093 | 2,20% |
RESULTADO PARCIAL | 76.904.936 |
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Se observa nuevamente la fuerte presencia de títulos públicos que componen el fondo. Aproximadamente el 74% del FGS está colocado en deuda pública, superando ampliamente el parámetro establecido, que lo coloca en “Hasta 50%”. Esta situación también se produjo en 2023 (71%) y 2022 (73%).
Las acciones son el segundo componente más importante del FGS, llegando al 17,21%. Es también el concepto que crece de manera sostenida desde 2022 (13,6%). Por el contrario, las inversiones en proyectos productivos experimentaron una profunda caída en los últimos 10 años: de representar el 12,87% en 2015, pasaron a 4,26% en 2024. Una situación similar se presentó con los préstamos para los beneficiarios del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), que de representar el 5% en 2019 pasaron al 1,13%, lo que equivale a una caída del 78%.
Actualmente, el FGS tiene un muy bajo nivel de disponibilidad de fondos líquidos (0,68%), situación que se suma al incumplimiento de los parámetros de inversión financiera establecidos en 2018. Estos criterios de dirección financiera de los recursos del Fondo fueron diseñados para garantizar una rentabilidad y preservar el valor del FGS. Desde 2018 hasta la fecha nunca se cumplió con los parámetros de inversión establecidos en su Carta Orgánica. El FGS es la herramienta contracíclica más importante para cuidar y sostener el sistema previsional y, en definitiva, los haberes que cobran los beneficiarios del SIPA, que a junio de 2025 llegaron a 6.1 millones de personas.
Para profundizar aún más en el tema, en el sitio de Fundación Éforo se encuentran publicados informes técnicos y ciudadanos.