Como organismo de control externo, dependiente del Congreso, que audita el uso de dinero público en dependencias de la administración pública nacional, la Auditoría General de la Nación (AGN) examina y emite dictámenes sobre los estados contables financieros del Garrahan. 

Además, dado que una parte del financiamiento es porteño, la Auditoría General de la Ciudad de Buenos Aires (AGCBA) también interviene como órgano de control de las transferencias que realiza el Gobierno local. Los informes realizados se encuentran en el portal de la AGCBA.  

En cuanto a los aspectos más vinculados a la administración, recursos humanos, equipamiento y cuestiones edilicias, la Unidad de Auditoría Interna (UAI) del Garrahan es la encargada de diseñar el plan de trabajo basado en riesgos institucionales y metas de gestión. La planificación debe ser aprobada en el Comité de Control Interno, conformado por autoridades del hospital (presidente del Consejo de Administración y consejeros) y representantes de la Sindicatura General de la Nación (SIGEN).

La SIGEN, como órgano de control interno del Poder Ejecutivo, también tiene competencia en el seguimiento de los manejos de los fondos y el cumplimiento de las normativas. Además, al participar en convenios con organismos internacionales o recibir donaciones específicas, en el hospital también suelen registrarse auditorías externas exigidas por los donantes.

¿Qué se controla?

Los informes de auditoría suelen abarcar temas como:

• Ejecución presupuestaria: si los fondos se usaron conforme a los fines previstos.


• Contrataciones: licitaciones, compras de insumos, contratación de servicios.


• Recursos humanos: planteles, sueldos, cargos, régimen laboral.


• Infraestructura y equipamiento: inversiones, mantenimiento y tecnología médica.


• Gestión de medicamentos e insumos críticos.

En gran parte de los informes publicados se recomiendan mejoras en los procesos administrativos, actualización de manuales de procedimiento y modernización en la gestión de datos. Algunos desafíos señalados en auditorías anteriores incluyen demoras en las compras centralizadas, dificultades en el seguimiento de convenios, y necesidad de fortalecer el control interno.