Hoy, a partir de un mayor entendimiento de los mecanismos que desencadenan las enfermedades oncológicas, se sabe que no se puede hablar de un solo tipo de cáncer de pulmón, de mama o próstata, por citar ejemplos: cada tumor se origina por mutaciones específicas diferentes, por lo que identificando la alteración genética, la investigación científica permitió desarrollar medicaciones específicas que actúan sobre esos mecanismos y logran resultados más profundos y sostenibles en el tiempo, una realidad impensada unas décadas atrás.


Este tema se abordó durante el AmCham Health Forum en el módulo denominado “Medicina de precisión: redefiniendo el diagnóstico y tratamientos”, del que participaron el Dr. Diego Kaen, médico oncólogo, Presidente de la Asociación Argentina de Oncología Clínica (AAOC) y Martín Yeza, Diputado Nacional por la Provincia de Buenos Aires.


El futuro de la medicina reside en la personalización de terapias. Hoy los biomarcadores guían las decisiones terapéuticas, determinando la selección de los medicamentos que serán más efectivos para cada perfil de paciente. En líneas generales, los estudios muestran que se ha logrado extender un año y medio la sobrevida de pacientes con cuadros para los que hasta hace poco tiempo no había opciones terapéuticas y además son meses de muy buena calidad de vida, especificó el Dr. Diego Kaen.


Por su lado, Yeza comentó: “La medicina de precisión puede revolucionar nuestro sistema de salud, colocando a Argentina en el mapa de la innovación global. Nuestro país puede mejorar mucho más sus tiempos burocráticos y emparejarlos a los de la FDA así como ponerse a tono con los países desarrollados en cuanto a regulación de patentes”.


“Hoy comprendemos que la individualidad tiene un impacto enorme en la salud. Cada uno de nosotros es único y nuestra atención médica también debería serlo. La medicina de precisión permite a los médicos utilizar información específica de cada individuo -como su composición genética, estilo de vida e historial médico- para diseñar un abordaje personalizado y preciso para cada paciente, de manera de mejorar y prolongar su vida”, afirmó Eduardo Junqueira, Gerente General de Johnson & Johnson Innovative Medicine en Latinoamérica Sur.


Un ejemplo claro del impacto de este tipo de terapias se evidencia en el tratamiento del mieloma múltiple, una enfermedad sobre la que ha habido avances extraordinarios. Dos décadas atrás, la expectativa de vida no superaba los 2 años; pero ahora, gracias a las inmunoterapias innovadoras, está por encima de los 8 años. Además, los especialistas coinciden en que se están dando pasos en el camino hacia la cura de esta enfermedad con el advenimiento de las terapias génicas que, en estudios clínicos, está alcanzando tasas de respuestas positivas por encima del 95%.


Sin embargo, los oradores coincidieron en que todavía persisten desigualdades en el acceso a las pruebas de biomarcadores o testeos genéticos, lo que impide identificar las mejores alternativas de tratamiento para todos los pacientes. La industria farmacéutica no es ajena a este problema: varias compañías, con el soporte científico de distintas sociedades médicas, como la AAOC, están en la búsqueda de alternativas que contribuyan a facilitar el diagnóstico temprano y certero para pacientes con cáncer de pulmón, más allá de su lugar de residencia o condición social.


“Este cáncer representa la primera causa de muerte por cáncer en Argentina, con aproximadamente 12 mil nuevos casos cada año, por lo que el tratamiento oportuno puede marcar la diferencia en el pronóstico de un paciente”, consignó el Dr. Kaen.


“Es necesario que los diferentes actores del sistema de salud trabajemos en estrecha colaboración para promover la prevención del cáncer y su diagnóstico temprano, para simplificar el camino que recorre cada paciente para acceder a la atención de su salud, así como para establecer los mecanismos que garanticen la equidad y permitan la incorporación de innovación que pueda transformar la vida de los pacientes”, concluyó Junqueira.