En una semana agitada por la caída de la ley ómnibus, recién este jueves cobró relevancia a nivel nacional que ninguna provincia había recibido los montos de esas partidas correspondientes a enero. Esto implicó que los gobernadores tuvieran que salir a compensar con recursos propios ese agujero, que en algunos casos constituye el 10% del salario de los y las docentes, o que directamente los trabajadores de la educación vieran recortado su sueldo.

En paralelo a esto, el Gobierno sigue sin convocar a la paritaria nacional docente, en donde se fija el piso desde el cual luego las provincias negocian con los gremios los salarios en cada distrito. Todo este cuadro complica muchísimo el inicio de las clases, que en muchos lugares del país tiene fecha para el 26 de febrero.“Esto es un alto conflicto ya de orden nacional. CTERA se expresó en estado de alerta y movilización y ha enviado carta documento a los Ministerios de Capital Humano y Economía para que no sigan reteniendo el envío de fondos que corresponde enviar por ley” expresó a Diagonales María Laura Torre, Secretaria General Adjunta de SUTEBA. Efectivamente, el Frente de Unidad Docente Bonaerense (FUDB) emitió ayer un comunicado en el que rechazó “categóricamente la decisión del Gobierno Nacional de retener indebidamente las partidas presupuestarias para educación que debe girar a cada provincia, en particular a la Provincia de Buenos  Aires”.

En concreto, el reclamo tiene que ver con tres partidas de recursos que se destinan al fortalecimiento del sistema educativo. El primero es el Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID), un fondo que surge de un impuesto especial que se aplica a autos y motos, que tiene asignación específica y que está consagrado en la Ley 25.053, sancionada en 1999. Con ese aporte del Gobierno Nacional se cubre en algunas provincias hasta el 10% del salario de los docentes, tal como sucede en la PBA. “Eso lo ganamos en el ayuno en la carpa blanca durante tres años, es un derecho que nos costó un montón” agrega Torre en relación al fondo que Milei y Caputo suspendieron.

El segundo es el Fondo Compensador, una partida que reciben unas 10 provincias donde los salarios docentes son más bajos y no llegan al piso nacional, justamente para compensar esa diferencia. A esto se suma el hecho que el Estado Nacional suspendió también el envío de recursos para asistir a los comedores escolares en las provincias, parte de las transferencias no automáticas que el Gobierno pisó casi en un 100% en lo que va del año.

“En enero no transfirieron absolutamente nada, los docentes que cobramos nuestro salario entero fue porque los gobernadores y gobernadoras se hicieron cargo de forma excepcional” relata María Laura Torre. A su vez, la Secretaria General Adjunta de SUTEBA agrega que “el 26/2 comienzan las clases en gran parte del país, y aún no tenemos la convocatoria a la paritaria nacional por parte del nuevo secretario, que se había comprometido a hacerla esta semana. Generalmente se llega a la paritaria habiendo tenido algunas reuniones previas, hoy no hemos tenido absolutamente nada”.

EL PANORAMA BONAERENSE

Ante esta situación, desde el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires se tomó la decisión de depositar la totalidad del salario docente de enero, cubriendo con recursos propios el agujero causado por la falta del envío de los fondos nacionales. “Todas las provincias del país están siendo sometidas al mismo retraso en la transferencia de los complementos salariales docentes por parte del Gobierno Nacional. La PBA manifiesta su enorme preocupación e insiste en que el Gobierno Nacional debe honrar sus compromisos y transferir los fondos de manera inmediata, a fin de dar cumplimiento a las Leyes Nº 26.075 y Nº 25.053” informaron desde la gobernación. En paralelo, el gobierno de Kicillof anunció también u aumento del 94% en la inversión alimentaria escolar, que alcanza a unos 2,4 millones de bonaerenses.

Sin embargo, el ahogo presupuestario al que se ven sometidas las provincias también quedó expresado en una alerta formulada por el gobierno provincial: “de persistir esta situación, la Provincia no podrá hacerse cargo de estos componentes salariales que son exclusiva responsabilidad del Gobierno Nacional”. En criollo, si Milei y Caputo persisten en su motosierra irracional, los y las docentes bonaerenses verán su sueldo recortado en un 10% justo el mes de inicio del ciclo lectivo, lo cual lógicamente podrá derivar en que las clases no comiencen en tiempo y forma.